Las eliminatorias de la Copa del Rey contra equipos de menor categoría, siempre son complicadas por la ilusión con la que afrontan el partido los locales. Sin embargo, aun sabiendo que el Castellón está haciendo un año casi perfecto en Primera Federación, Osasuna consiguió igualar la intensidad y tras un encuentro disputado, los rojillos se llevaron el partido en la prórroga. Vemos cuáles fueron las claves del encuentro.
Un Castellón muy ofensivo
Con la propuesta de juego que tiene el Castellón, donde trata de salir jugando desde la defensa y acumula mucha gente en posiciones intermedias para atacar con asociaciones en corto, Osasuna tuvo que hacer un planteamiento de partido muy reactivo, teniendo como principales armas los desplazamientos en largo y los robos de balón en campo contrario.
Cada vez que Osasuna trataba de combinar en corto, los balones acababan en Aitor, y obligaban con su presión a pares, a golpear en largo. Esto propició muchos duelos aéreos, en los que lograr peinar el balón o dejar que corra, generaba 1vs1 con mucho espacio. Vemos uno de los balones en largo que generó una situación de gol clara.
El trabajo en presión
En la presión y en los duelos, Osasuna fue muy dominador durante toda la primera parte, Ganar los duelos en medio campo fue fundamental para minimizar el fútbol del Castellón y para generar transiciones con situaciones de superioridad. Darko y Pablo con 17 recuperaciones entre ambos marcaron la diferencia propiciando robos de balón muy importantes, tanto para evitar una transición del Castellón, como para generar una situación de peligro. Con un poco más de puntería, el marcador se hubiese abierto mucho antes.
La importancia de Herrando y David, para defender hacia adelante, fue fundamental para solventar jugadas donde el Castellón tenía ataques potencialmente peligrosos. En muchas jugadas, conseguimos ver 7 u 8 jugadores amenazando en campo contrario.
Los que marcan las diferencias
Durante la segunda parte, vimos un Osasuna más vulnerable. Comenzó a ser menos dominador en el centro del campo y tuvimos tramos del partido donde los locales estuvieron cerca de llevarse el partido. La tendencia cambió cuando Jagoba movió el banquillo. Areso, Peña y Arnaiz, se mostraron muy determinantes en los minutos que jugaron, subiendo el nivel del equipo y volviendo a equilibrar el partido hacia el lado rojillo.
En tan sólo 41 minutos José Arnaiz, realizó 3 tiros a puerta, 5 regates y ganó 8/12 duelos. Mostró el buen nivel que está alcanzando en los últimos partidos y se postula a ser uno de los jugadores más determinantes del equipo Navarro.
Esta victoria, ayuda a afrontar la Supercopa con un ánimo especial y permite a Osasuna seguir soñando con repetir la gesta conseguida el año pasado.
Entrenador de fútbol y amante de este deporte. A Rubén le encanta ver los partidos con una perspectiva diferente y descifrar el porqué de cada suceso en el terreno de juego.
