En un fútbol cada vez más abocado al dinero y al interés de unos pocos que utilizan el deporte para lucrarse a sí mismos, se nos olvida que todavía existe un fútbol más humano, donde niños y padres demuestran que lo mejor es vivir el fútbol desde la pasión y el amor por unos colores.
Este es el caso de Elizabeth y su padre. Ella está viendo a su equipo, Osasuna, por primera vez en directo en El Sadar. Su padre tiene una alta discapacidad visual, pero eso no es un impedimento para disfrutar de lo que más le gusta junto a ella. Elizabeth, emocionada y muy feliz por ver a su equipo por primera vez desde el estadio, le cuenta a su padre lo que sucede en el partido y ambos viven cada jugada, a pesar de que él no lo pueda ver.
Elizabeth le explica a su padre la jugada del primer gol entre el Chimy y Budimir. Además, le cuenta emocionada como Chimy Ávila, su jugador favorito, corre por la banda donde ambos están sentados. En el descanso, ella se ve intrigada por saber si habrá un chico o una chica dentro de la mascota de Osasuna “Rojilla”. Asimismo, los dos celebran eufóricos el segundo gol de los rojillos y tras el encuentro, el padre comenta a los micrófonos, emocionado, que tenía ganas de vivir un partido junto a ella.
Un vídeo que nos hace soltar una lagrimilla y nos muestra que lo importante en el fútbol es vivirlo con quien más admiras y quieres.
