in , ,

Las claves del desastre rojillo en el Santiago Bernabéu

Los rojillos mostraron una faceta poco reconocible entre los aficionados

Las claves del desastre rojillo en el Santiago Bernabéu

Un Osasuna irreconocible no consigue competir en su visita al líder. ¿Por qué no nos hemos sentido identificados tras ver el partido? El partido estuvo en reconocer qué había funcionado durante la primera parte y reproducirlo la segunda. Acompáñame y lo vemos.

Mal inicio 

Jagoba volvió a plantear un escenario donde no quería que sucediesen muchas cosas, sobre todo quería evitar las transiciones DEF-ATA que tan reconocibles hacen a los blancos. Para ello, renunció al balón, busco atacar rápido con balones largos y tras perdida priorizó replegar y estar ordenados muy juntos.

Las claves del desastre rojillo en el Santiago Bernabéu

Los datos de la primera parte demuestran que el plan de Jagoba no estaba mal planteado.

Real Madrid: 0.28 goles esperados en 1/2 tiros a puerta

Osasuna: 0.29 goles esperados en 0/5 tiros a puerta

Sucedieron pocas cosas, pero seguimos viendo la poca contundencia defensiva que nos está acostumbrando. Bellingham entra solo al área y el Real Madrid no perdona. Con muy poco, en un contexto favorable para la defensa concedes el primero.

Un Osasuna débil en duelos y con dificultad para encontrar jugadores vestidos de rojo en el campo hizo palpable que darle el balón al Madrid, cada vez que lo robabas, no era buena idea. A pesar de que pasasen pocas cosas, se estaba propiciando un escenario muy favorable para el Real Madrid, además de que ya tenía ventaja en el marcador. Vemos como Torró detecta una posible debilidad del Madrid en campo propio y se enfada con Juan Cruz. 

El mejor momento de Osasuna

A partir de ese instante, Osasuna encadena sus 15 mejores minutos del encuentro y descubre la llave para poder competir al Real Madrid.

Se crea desde la base, con mucha movilidad de los 3 MC + Rubén García cuyo objetivo es hundir al Madrid desde la circulación de la pelota y acabar entrando por bandas. Siempre en la estructura de creación veíamos un pivote defensivo con el que conectar primero y unos interiores con mucha movilidad generando ventajas para progresar. Aquí se ven varios ejemplos de lo que funcionó.


Osasuna sube líneas, empieza a jugar en campo contrario y tras perdida vuelve a apretar, de ahí, la última acción que tiene Budimir de empatar el encuentro. Eso si es una Osasuna reconocible. 

Una pena que el rendimiento de Rubén García esté siendo tan bajo en estos instantes. Pisó área varias veces con peligro, pero no consiguió conectar con nada favorable en ninguna. Fue el jugador que peor % de acierto con el pase tuvo, 25/40 pases intentados. Además destacan la poca participación de un jugador muy en forma como Rubén Peña con 11/13 pases intentados y la mucha y buena participación de Areso 39/48 pases intentados.

Vivos al descanso e inicio del segundo acto

Se había conseguido lo más difícil. Ir al vestuario con la sensación de que podías sacar algo positivo del encuentro. Sin embargo, los primeros 10 minutos después de salir del vestuario y hasta el gol de Bellingham se reprodujo la misma secuencia. Desplazamiento en largo, no se gana el duelo, no se gana caída, el Madrid te encierra, te crea una ocasión de gol. Así, hasta que encajaron el segundo.

Es algo inexplicable, que después de ese segundo gol, Osasuna vuelva a salir con el balón jugado desde atrás, repitiendo patrones que funcionaron la primera parte, y justo después de hacerlo, se generó la primera ocasión de gol de la segunda parte.

A raíz de ahí, el encuentro está a merced del líder, vimos un Osasuna anti competitivo y una actitud de apatía en varios jugadores que no es característico de los valores que muestra el club. Se registraron uno de los días con menos recuperaciones de balón y menos duelos aéreos ganados.

34 balones recuperaos / 53 el día del Alavés 

5 duelos aéreos ganados / 18 el día del Alavés

Fue el día que más goles esperados se concedieron en lo que va de año: 3.2 goles esperados, contando el penalti. En ningún encuentro de la temporada pasada logró conceder tantos goles esperados. Para que pongamos en valor el mal partido defensivo que se hizo. Cada ataque del Real Madrid muestra apatía en labores defensivas como en el segundo gol de Jude.

Mucho que mejorar… pero hay tiempo

Esto debe ser un punto de inflexión, no por el resultado ni por el rival, sino por la actitud. La siguiente cita es muy favorable para darnos por fin nuestra primera victoria en el Sadar.

La situación no es alarmante ni mucho menos. Osasuna ha tenido un inicio de calendario muy difícil. Sin embargo, empieza a ser recurrente que esperemos más de los rojos, ya que están dejando partidos muy dubitativos y a largo plazo puede suponer problemas. Jagoba tiene dos semanas ahora para potenciar lo que está haciendo bien y trabajar en lo que se está haciendo mal.

Written by Rubén Díez Díaz-Crespo

Entrenador de fútbol y amante de este deporte. A Rubén le encanta ver los partidos con una perspectiva diferente y descifrar el porqué de cada suceso en el terreno de juego.

Los cinco que menos juegan

¿Quién se ha coronado como jugador Kosner del mes de septiembre?