Domingo de pesadilla el que ha vivido la afición rojilla. A las 14h visitaba Osasuna el Benito Villamarín con la ilusión de poder lograr los tres puntos, pero todo acabó con un gol en la última jugada que dejó lleno de rabia al conjunto dirigido por Jagoba. Tres horas después jugaba el Promesas ante el Barça Atlètic y todo parecía ir bien en la primera parte al ponerse por delante en el marcador, pero los catalanes remontaron con un gol en el 92’.
Dos partidos que se escapan con un gol en el último suspiro y que amainan el estado de ánimo entre la afición.
Se escapa un empate valioso
Daba inicio el encuentro entre Real Betis y Osasuna con unos primeros minutos sin un dominador claro, la posesión repartida y mucha disputa. Ambos conjuntos contrarrestaban las virtudes del otro. La primera la tuvo Marc Roca con una volea lejana, más tarde sería Budimir quien estaría cerca de marcar en un cabezazo.
La liaba Rubén Peña en el área lo que iba a propiciar la primera ocasión clara en las botas de William José, que no remata bien y le sale el disparo botando y yéndose alto. Unos minutos más tarde, llegaba bien por la izquierda el conjunto verdiblanco e Isco, en un balón franco para empujara gol, acaba pegándole el balón en el muslo y enviándolo fuera.
Justo cuando llegábamos al descanso, Isco ponía un centro al primer palo, que remata de primeras a bocajarro William José. Mala ejecución defensiva en la que queda libre el primer palo.
La segunda parte arrancó con un gol anulado a Raúl García por fuera de juego previo. El Betis estaba siendo mejor y Diao forzaba un penalti con el que David García quedaba expulsado, pero el VAR subsanó el error del árbitro al no haber contacto suficiente para decretar penalti.
Los cambios mejoraron relativamente a Osasuna que logró empatar en un balón en largo de Catena, que controla Rubén García, conduce hasta la portería y fusila a Bravo. El empate parecía ya definitivo, pero un córner mal defendido por falta de concentración era ejecutado en corto, la puso rasa Abde, la deja suelta Mojica y llega para empalarla Isco de volea para hacer estallar el Villamarín en el 94’.
Marc Guiu amarga al Promesas
Partido que comenzaba con un Barça B dominador de la posesión y un Osasuna Promesas que esperaba su oportunidad al contraataque. La primera ocasión llegaba en un balón en largo, previsiblemente para el portero, pero llega Ander Yoldi para meter la cabeza y a punto estar de dirigir el esférico a portería.
En el 32’ Svensson metía un balón para Unai Buján que le ponía el pase de la muerte a Ander Yoldi y este la picaba para batir a Astralaga.
Ya en la segunda mitad se animaba el Barça B con un disparo lejano de Unai Fernández que se marcha al palo. Posteriormente, Aleix Garrido iba a recibir un pase en el área y remataba de primeras a bocajarro, pero Pablo Valencia realizaba un auténtico paradón cerrando las piernas y así evitando el empate.
Otra ocasión de Aleix Garrido que disparaba desde la frontal de primeras ajustada al palo corto, pero Pablo Valencia metía una gran mano abajo. En el 79’, el cuadro culé sacaba un córner al segundo palo, un jugador blaugrana la cabeceaba hacia Pau Victor que remataba, la sacaba la defensa rojilla, pero en segunda instancia nada pudieron hacer y los locales empataban el partido.
Trataba de reaccionar el Promesas con una volea desde la frontal de Eneko Aguilar, que le pega con bote y a punto está de anotar, pero lograba despejar el guardameta. Rubén Azcona remataba un centro raso de primeras con el interior, pero salvaba Astralaga el tanto con un paradón.
Asi parecía que iba a acabar el partido, pero en el 92’, una gran jugada por dentro de los catalanes, dejaba solo a Marc Guiu ante el portero y la iba a cruzar para darle la victoria a su equipo.
En definitiva, ha sido un domingo de auténtica pesadilla para Osasuna que se ha quedado sin premio por los descuentos y pierde puntos importantes.