La mañana del 2 de mayo de 2007, con motivo de la disputa del partido de vuelta de las semifinales de la Copa de la UEFA entre Sevilla y Osasuna, la expedición rojilla puso rumbo a la capital andaluza en un Boeing 757 de la compañía Privilege Style. La cita era histórica y contó con un detalle especial: el avión estaba engalanado para la ocasión con el escudo y el nombre de la entidad.
La aeronave trasladó a una expedición por 200 pasajeros integrada por 18 jugadores, cuerpo técnico, directivos, medios de comunicación y 125 aficionados.