La confirmación de que el encuentro entre el FC Barcelona y Osasuna, aplazado por el repentino fallecimiento del médico del conjunto culé, será el día 27 de marzo, no ha contentado a ninguna de las dos partes. Ambos clubes han tratado de recurrir la decisión de La Liga. Sin embargo, esta se ha mantenido firme y no ha quedado más remedio que afrontar un exigente encuentro en el que el foco se lo está llevando los jugadores con compromisos internacionales. Y es que es lo que tiene poner un partido 2-3 días después de un parón de selecciones.
En el conjunto blaugrana, los perjudicados han sido Araujo y Rapinha que disputaban encuentros de clasificación para el mundial 2026 con las selecciones de Uruguay y Brasil, respectivamente. Estos han viajado a Madrid directos y estarían disponibles, con cierto margen, para medirse a los rojillos. Sin embargo, Hansi Flick ha decidido reservarlos para futuros partidos.
La locura de viaje de Boyomo
Pero sin duda, el jugador que “se lleva la palma” por haber vivido un viaje más “surrealista” es Enzo Boyomo. El central rojillo jugaba con la selección de Camerún ante Libia el martes 25. Finalmente no jugó un solo minuto y se quedó en el banquillo. Aún así, el viaje de vuelta ha consistido en casi 8.000 kilómetros:
- Viaje de 4 horas y media en coche desde Duala a Yuandé (capital de Camerún). 217 kilómetros.
- Desde Yuandé viajará a Estambul en avión. El vuelo es de 7 horas y 15 minutos.
- Tras aterrizar en Estambul, el zaguero camerunés tendrá que viajar en avión desde Estambul hasta Madrid lo que suponen 4 horas y 30 minutos más.
- Y, por último, habrá cogido un tercer y último avión de Madrid a Barcelona que tarda 1 hora y 15 minutos.
Por lo que en total, Boyomo habrá viajado más de 17 horas y 30 minutos en dos días para estar disponible para Vicente Moreno en el imponente duelo ante el FC Barcelona dada la dinámica del club navarro y la necesidad imperiosa de sumar puntos.
