Osasuna 1920
El entrenador de Osasuna, Petar Vasiljevic, sabe que este fin de semana pasa por El Sadar una de las últimas opciones de mantener viva la llama de la salvación. Visitará Pamplona el Sevilla, un rival enrachado que viene de ganar al Real Madrid y podría cuajar, si gana o empata, la mejor primera vuelta de su historia.
Consciente de la entidad del rival, Vasiljevic ha empezado a preparar el partido de este domingo (12 horas) como una final. Sin ir más lejos, el equipo realizó la sesión más larga que se recuerda esta temporada. Más de dos horas de entrenamiento a -4ºC sobre el césped de hierba artificial de Tajonar -el de hierba natural estaba congelado-.
En esta sesión, Vasiljevic y Alfredo programaron ejercicios de alta intensidad, en espacios reducidos y con muy pocos toques, con el objetivo de que el equipo se acostumbre a la presión sobre el rival. «Sabemos que están muy bien», gritó Vasiljevic a sus jugadores en referencia al Sevilla, «por eso tenemos que estar muy encima».
Una estrategia, la de la presión adelantada, que ya le dio muy buenos resultados al Real Madrid en el partido de ida de la Copa del Rey. Y también al Granada, que venció por 2-1 al equipo del Nervión hace tan solo un mes.
Argumentos que tendrán que verse demostrados el domingo en El Sadar, donde Osasuna quiere terminar la primera vuelta con un botín superior a los 9 puntos actuales. En la peor temporada de su historia en Primera División (1993-1994), el equipo rojillo terminó la primera vuelta con 11 puntos.
